‘El río de la ira’: historia de una venganza
Rudy Red (Willa Fitzgerald) y Shelby John (Jack Huston) luchan juntos por zafarse de la oscuridad en la que les ha sumido su adicción a las drogas, en su pequeño pueblo del estado de Georgia. Hasta que un día sucede algo inesperado (o no) que provoca una escalada de violencia sin retorno.

Lo último de Robert de Niro y John Malkovich sitúa a los dos cracks de la interpretación a las órdenes de Randall Emmett (productor de ‘El irlandés’). Ambos convencen en sus papeles secundarios, en este thriller dividido en dos partes bien diferenciadas. ‘El río de la ira’ es primero un drama romántico que desemboca, por venganza, en una espiral de violencia presuntamente redentora. El viernes 13 de enero… el desenlace en las salas de cine de nuestro país.
‘El río de la ira’ es, sobre todas las cosas, una historia fundamentada en el amor y la pérdida. La cinta que dirige Randall Emmett (la segunda, después de ‘Tras la pista del asesino’, su primer film como director) se divide en dos tramas completamente diferentes, con dos ritmos, dos atmósferas y dos propósitos. ¿La resolución? A partir del 13 de enero en cines.
‘El río de la ira’: del amor a la pérdida, pasando por las drogas
La pareja protagonista, que acapara la primera mitad del film, está formada por Willa Fitzgerald (en el papel de la bella Rudy Red) y Jack Huston (como su amado Shelby John).

Rudy Red y Shelby John están atrapados en un mundo de autodestrucción, y juntos deciden sacar fuerzas de donde no las tienen para salir. En el pueblo en que viven, Wycross, muchos han muerto por culpa de las drogas, y el resto trafica con ellas. Aunque no es la primera vez que intentan dejarlo, ésta será la definitiva.
Durante la primera parte de ‘El río de la ira’, el espectador se impregna de su oscuridad, de los momentos en que el polvo blanco entra en su pequeña casa. Pero también experimenta su inmenso amor. Podríamos decir que en la primera parte, vivimos un drama romántico en toda regla.

La pareja protagonista (de una gran solvencia interpretativa) intenta ver la luz, y hay momentos del film en los que lo consiguen, como en la escena del cumpleaños de su sobrino, como una familia normal.
David contra Goliat, o un hombre solo frente al mundo (de los malos)
Shelby John (Jack Huston) protagoniza la segunda parte del film, a la caza y captura de quienes han arruinado su vida. El título original del film lo dice todo: ‘Salvación Salvaje’. Salvaje, porque la persecución a los responsables del tráfico de drogas en el pueblo es feroz y se rige por la premisa del “ojo por ojo, diente por diente”. Salvación porque a través de su venganza busca llegar al final del río y reencontrarse allí con su amada.

Dos purasangre, en papeles secundarios
En paralelo a la historia de amor desgarrado entre los jóvenes protagonistas se sitúan dos grandes maestros de la interpretación. Ambos tienen papeles secundarios, y ambos los bordan, como era de esperar.
Robert de Niro es el sheriff Church que, junto a la detective Zeppelin, hace ímprobos esfuerzos por mantener el orden y la ley en un pueblo corrompido desde los cimientos. Church arrastra un drama personal, además de encontrarse ya en retirada existencial. Salvar a Shelby del desastre es su objetivo, intentar que no convierta el lugar en un reguero de sangre y venganza.

El otro peso pesado, también como secundario, es John Malkovich. Padre de familia correcto, impecable aglutinador de los valores loables que se esperan de un buen americano, Peter es el cuñado de Rudy Red. Su monólogo final es increíble.
El director de la cinta y un sueño cumplido
Randall Emmett, director de ‘El río de la ira’, es conocido por haber producido más de 120 largometrajes y series de televisión. Entre sus títulos más destacables están películas icónicas como ‘El irlandés’ o ‘Silencio’ de Martin Scorsese. Y es precisamente de este director de quien habla Emmett: “una de las grandes alegrías de mi carrera ha sido producir las dos últimas películas de Martin Scorsese. A través de estas experiencias, Marty se ha convertido en mi mentor. Sin duda, mis conversaciones con él a lo largo de los últimos seis años me han inspirado para dejar el papel de productor y pasar a dirigir”. ‘El río de la ira’ es la segunda cinta que dirige Randall.
Y el responsable del film añade: “Espero que sus sabias palabras y su apoyo en este proyecto me permitan utilizar, aunque sea un poco de la magia que ha podido dar él al público de todo el mundo. Soy muy afortunado de tenerlo como parte de este viaje conmigo”.

Respecto a los dos pesos pesados, concluye: “De Niro es uno de los mejores actores de nuestra generación y quizá de todos los tiempos. Con Malkovich siempre he querido trabajar y ha aportado seriedad y sensibilidad a su personaje. Jack Huston es un plus. Tengo el casting soñado”.
Completan el equipo de este largometraje estadounidense los guionistas Adam Taylor Barker y Chris Sivertson. La música del film ha sido compuesta por Philips Klein.